POR: CARLOS DE LA MORA
Valladolid.-
Mientras los vallisoletanos siguen soñando con alguien que pueda dar “todo por
Valladolid”, nuestras instituciones siguen secuestradas por grupos caciquiles.
La
apatía de las asociaciones civiles, dirigentes y líderes, se suma al letargo de
las fuerzas vivas del municipio, haciendo más lento y tardío el despertar del
pueblo conformista, capaz de venderse por una despensa o un raquítico apoyo.
De
acuerdo al panorama, ya no vale decir que ustedes el pobre pueblo de Valladolid,
tomen una decisión inteligente y bien acertada, porque ni siquiera a eso
tendrán derecho en la próxima contienda política.
Los
acontecimientos más recientes definitivamente cambiaron el rumbo de México y la
conciencia de los políticos que hace algunos años se guardaban para hacer las
cosas. Hoy por hoy, así como no nos sorprende saber que una niña de 12 años
salió embarazada, teiboleras departiendo con políticos, Ayuntamientos en
bancarota, malos manejos del erario público, curas pederastas, la gaviota tiene
una casa de lujo que ni el magnate Carlos Slim puede tener y todavía así
nuestro flamante presidente Enrique Peña Nieto se atreve a decir que no hay
nada que ocultar, aunque no aclara si fue un chanchullo o un bistek lo de la
casa Rivera-Peña Nieto.
Si
tan solo lo anterior es la punta de la madeja, imagínese que habrá en el fondo
de todos los tejemanejes políticos.
Ahí
usted amigo lector tiene la última palabra.
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